domingo, 21 de febrero de 2010

FILOSOFIA

LA PASIÓN DE MI VIDA

Cuando me han me preguntado ¿Por qué soy docente? He respondido: es una profesión que tiene un gran impacto en la vida de cada uno los pequeños, porque contribuye a la formación y a la preservación de la sociedad mexicana.

La tarea del docente implica un compromiso y una enorme responsabilidad dentro de las aulas, porque con nuestras acciones, actitudes puedo generar y abrir nuevas ventanas para el aprendizaje o puede cuartar y marcar severamente la vida del alumno.

Es por ello que yo me he preocupado y dado a la tarea de ser comprometida con mi trabajo, con mis alumnos, he buscado la manera de que vean en mi a una persona ejemplar, siendo puntual, atenta, respetuosa, organizada, que con mis acciones y actitudes contribuyan a la formación de hábitos, valores y sobre todo de aprendizajes en mis alumnos.

Las experiencias como estudiante y ahora como docente me han permitido apropiarme de modelos de enseñanza que me han sido útiles en mi trabajo, procuro que sea dinámico, que los alumnos sean partícipes, dando oportunidades para que expresen, propongan e interactúen entre sí, reconozco que aún muestro ciertos rasgos conductistas, como decirles a mis alumnos qué vamos a hacer y el cómo se va a realizar, al igual he sido una emisora de conceptos.

Considero que es parte fundamental que como maestra vaya en la búsqueda de la mejora continua de mi práctica educativa, que me prepare y actualice constantemente, al igual que indague y adquiera aquellas estrategias o habilidades para una mejor intervención docente. Es por eso que decidí estudiar la maestría, con la idea de perfeccionar y prepararme para lograr proporcionar una mejor atención a mis alumnos, conocer y saber cómo trabajar con el Programa de educación preescolar, desarrollar habilidades que me permitan actuar de manera más pertinente y adecuada con mis alumnos, padres de familia y compañeras docentes.

Poco a poco he interiorizado la importancia de reflexionar y evaluar mi trabajo, a cuestionarme cada día de lo que hago y qué tanto estoy correspondiendo a los principios que marca PEP 2004.

Cada año escolar la convivencia con los alumnos me ha enseñado que darles un buen trato, evitando etiquetarlos, que mis palabras o mis acciones, son elementos importantes que contribuyen al proceso de enseñanza aprendizaje. Cuántos de nosotros no recordamos aquellas palabras cálidas y aliento de alguno de nuestros profesores que contribuyeron a aprender o a seguir esforzándonos.

En este momento estoy en un proceso de reconocimiento y reconstrucción de mi ser como docente, cambiando concepciones e ideologías, creo firmemente que el niño llega a la escuela con un cúmulo de conocimientos y habilidades, que es función de la escuela y en especial del docente crear un ambiente agradable, de confianza, donde a través de las diversas oportunidades el niño pueda acrecentar aquellos conocimientos y habilidades.

El trayecto de la enseñanza es un sendero que cada día trae consigo nuevos aprendizajes, es un proceso inacabado, porque cada momento que vivimos es una oportunidad para obtener más conocimientos. El niño aprende en todo momento, como menciona Emilia Ferreiro “Tienen la mala costumbre de no pedir permiso para aprender” es por eso que nuestro actuar debe de ser más consciente, con objetivos claros, ser promotora, guía y mediadora en conformación de conocimientos.

Mis metas para un futuro es seguir preparándome y actualizando, que todos aquellos conocimientos y contenidos analizados en el transcurso de esta maestría, sean una herramienta para mejorar y lograr ofrecer una educación de calidad para cada uno de mis alumnos. Así mismo llevar a cabo metas y objetivos personales. Dejar en cada uno de mis alumnos una semillita que le permita construir una vida plena, quiero ser una persona de cambio.

Estoy convencida de que el logro de los cambios en el sistema educativo tiene que empezar desde las aulas, la transformación de la prácticas docentes, el cambio de actitudes y la apertura a reconocer que nuestra labor implica estar en continua preparación. Por tanto asumo el compromiso que como maestra tengo en mis manos y procuro dar lo mejor de mi cada día, para que el tiempo que mis alumnos pasen en el Jardín sea digno de ser vivido.

viernes, 19 de febrero de 2010

INTENTO DE ARTEFACTO

¿GENERADORA O LIMITANTE?
Cuántas veces hemos escuchado que una educadora, es aquella persona que le agradan los niños, es paciente y a su vez es muy creativa, pero poco se ha reconocido la ardua labor que se hace en el aula, no es una tarea sencilla, hay que estar intentando y probando estrategias que nos apoyen, los coros, la gesticulación, la entonación y cambio de voz, mediadores que utilizamos para atraer el interés y sobre todo para generar aprendizajes.

Pero ¿qué pasa cuando has intentando todo?, cuando sientes que has hecho uso de todos los recursos o ases que tenías bajo la manga, que por más que intentas no logras que tus alumnos se integren, o se interesen, has sentido desanimo, preocupación, he inclusive te has dicho a ti mismo que no puede más.
Les voy a compartir mi experiencia, fue en el Jardín de Niños: “La Pajarita”, estando al frente del grupo de 1° B, conformado por 25 alumnos, de los cuales 13 niñas y 12 niños, el grupo era muy diverso, sobresalían las personalidades existentes de cada alumno, en especial la de Israel, un alumno de complexión delgada, con estatura promedio, inteligente, amigable, juguetón pero a la vez se mostraba caprichoso, impulsivo y rebelde.


Durante el transcurso del ciclo escolar, mostraba dificultades para respetar acuerdos y reglas, había días que no quería entrar al salón, así mismo hacia acciones que implicaban llamar su atención como la vez que se orino enfrente de todos, o cuando lanzo la playera al baño, pocas veces se integraba a las actividades grupales como cuentos o dinámicas, le agradaba construir con los bloques y sobre todo dibujar, lo hacía con tal precisión que no pareciera que era un niño de tres años.


En los primeros meses tenía un gusto y una afición por lo religioso, a todo le encontraba forma de crucifico o de iglesia, cualquier oportunidad que tenia para dibujar era lo que realizaba( ver dibujo N° 1), muchas veces platicando con su mamá sobre este aspecto ella decía que no entendía el porqué, ellos no eran muy religiosos, solo asistían a misa los domingos.
Con sus pertenecías era muy cuidadoso no le agradaba que le tomaran algo, o inclusive cuando se le maltraba su trabajo armaba tal escándalo que no había poder humano que lo tranquilizara.



Era algo complejo establecer una buena relación, era un estira y afloja, porque todo dependía del estado de ánimo con el cual llegara, como lo sucedido el día 8 de Octubre del 2008, estábamos en el recreo, cuando uno de los alumnas se acerco a decirme que Israel no las dejaba jugar, en ese momento me acerque al lugar donde estaban, efectivamente Israel estaba jalando y subiéndose a la estufa de juguete, que las niñas estaban utilizando.


Le dije con voz firme ¡por favor deja esa estufa!, levanto su carita pero no atendió a mi petición, entonces volví a reafirmar mi indicación a la cual volvió a ignorar, y continuaba levantando la estufa, mi reacción fue poner mi mano sobre ella, con la finalidad de darle peso y así desistiera Israel de levantarla, al ver mi acción me mira de frente con cara de molesto, levanto la mano y lanzando un carrito de juguete que traía, golpeo mi cara, no recuerdo que semblante puse pero me imagino que reflejaba el sentimiento de tristeza, porque me vio fijamente y con la expresión de asombro, me di cuenta que estaba pensando en lo que había hecho, pareciera que estaba arrepentido y preocupado.
No me agrada mucho hablar sobre esta experiencia pero a partir de la elaboración de este portafolio y en la búsqueda de artefactos me encuentro el registro de este día (artefacto 1°), en la cual describo claramente mi sentir:

Hoy no fue un gran día para mí, he comprendido que necesito cambiar algunas actitudes hacia Israel, a pesar de que hizo algunas travesuras (lanzar la playera al baño, pegarle algún compañero y lanzarme un carrito) la verdad me hizo sentir que ya no podía más, que ya no sabía cómo actuar ante él, ¿Qué acciones realizar?, me hizo pensar ¿Qué tan mal le caigo para que me pegara?
Después de unos minutos de llorar y hablar con las compañeras sobre cómo me sentía, me hicieron pensar y darme cuenta que si había cometidos errores, como darle más atención y darle por su lado para evitar problemas, han visto que he buscado algunas alternativas, que él necesita otra atención, estos comentarios me hicieron sentirme más tranquila, pero eso no ha impedido que me siga cuestionando ¿cómo o que hacer para evitar que Israel siga portándose así?

Artefacto 1 Fragmento de Diario de Observaciones (8- Oct. -08)

Después de esta situación me di a la tarea de buscar orientación, en estar más atenta del lo que hacia Israel, a conocerlo mejor, saber cuáles eran sus gustos y sus preferencias, como menciona el PEP 2004 “el conocimiento de los alumnos se logra en medida de las oportunidades para observar, su actuación y vivir con ellos, en diversos tipos de situaciones dentro y fuera del aula”. Pág. 117


Poco a poco fui implementando diversas estrategias que a la vez contribuyera para establecer un ambiente agradable para Israel, como para los demás alumnos. Fue cambiando mis acciones y mis actitudes que son factores importantes y claves para el logro de los propósitos planteados.
Entre las acciones realizadas fue hablar con los papás sobre las actitudes de Israel, con la finalidad de conocerlo más, al igual saber que era lo que pensaban y establecer acuerdos, les propuse llevar al niño a una atención especial con la finalidad de saber que era lo que sucedía, saber si el niño presentaba algo, o si era yo la que no estaba actuando bien, los resultados obtenidos mostraron que esta actitudes eran por la carencia de acuerdos y reglas en la casa del niño, además que la situación familiar en la que estaba inmerso, donde el papá trabajaba fueras y sólo lo veía en fines de semana, dándoles la libertad de que se comportara como él quisiera, comentaba la mamá que cuando él llegaba ellos no la respetaban ni le hacían caso


Fueron muchas estrategias utilizadas como el tiempo fuera, hablar con él, realizar una tabla de registro de las actitudes y desempeño, darle comisiones, pero lamentablemente ninguna tuvo éxito, fue hasta mediados de Enero que cambio sus preferencias religiosas por una afición a la lucha libre y a las momias, contaba con lujos de detalles lo visto en las películas del Santo, entonces fue que se me ocurrió comprarle una máscara del luchador para usarla como mediador, y así establecimos un convenio, en medida de su conducta, yo le prestaría la máscara para jugar en el recreo. No sé si esta estrategia fue correcta pero por un largo tiempo obtuve resultados.


Muestro este registro porque me ayudo a recordar no solo ese momento vivido, sino más bien otras situaciones que se dieron, pero sobre todo me hizo reflexionar y pensar más detenidamente sobre mis acciones, las cuales no fueron suficientes, me atrevería a decir fuero momentáneas y sin un fundamento que lo sustente.


En realidad no contribuyeron mucho, porque la actitud de Israel era muy semejante, había veces que se integraba al aula, participaba, hacia su trabajo con detenimiento, con dedicación, jugaba y convivía con sus compañeros, pero otras veces no era así. De igual manera mis actitudes eran diversas, en ocasiones me mostraba tolerante, respetuosa, buscando que mis palabras y acciones fueran las correctas, tratando de brindarles seguridad y confianza en mí, pero otras veces me desesperaba, quería que con un gesto o una acción obtuviera resultados.


Pero haciendo un análisis más profundo me he dado cuenta que no basta con una buena intención o con actitudes momentáneas, sino por el contrario debe ser un trabajo constante y paulatino, no se logra a la primera, es como todo aprendizaje debe ser gradual y sistemático.


Considero que mi actuar no fue correcto porque estaba centrando mi atención a lo que sucedía alrededor de él, sentí que estaba desatendiendo a los demás y eso, es una situación que ahora me causa remordimiento y culpabilidad, porque no propicie que mis alumnos se sintieran apreciados y reconocidos, estos es tarea importante en el logro de su seguridad e independencia, ahora me cuestiono ¿Qué aprendizajes y habilidades habría logrado si mis actitudes hubieran sido diferentes?


La intervención docente es aspecto clave, porque es la que genera esas oportunidades y espacios para el aprendizaje, así mismo contribuye a la dinámica dentro del aula, porque a través de sus cuestiones, expresiones, y momentos de interacción se va generando un clima estable.


Donde los alumnos tengan la oportunidad de interaccionar y compartir con los compañeros, darse cuenta de las características físicas, sus cualidades, limitaciones y las de sus compañeros, que en la dinámica del aula, el alumno tome conciencia de los acuerdos y reglas establecidas para una mejor convivencia, establecer comportamientos diferentes, desarrollar habilidades de comunicación, de apoyo.


Retomando lo anterior considero que si mis actitudes desde un inicio hubieran estado enfocadas al establecimiento de un buen ambiente, al reconocimiento de cómo eran mis alumnos, que habilidades, capacidades tenían, mis intervención docente hubiera sido más certera para mis alumnos.


Reconozco que no basta con un ambiente agradable para mis alumnos, sino que las oportunidades que ofrezca impliquen a mis alumnos poner en juego sus conocimientos, destrezas o habilidades, pero de igual manera hacer que ellos se den cuenta de este proceso, Elena Bodrova ( 2004) hace referencia a utilizar estrategias de lenguaje en el aula ( verbalice sus acciones, utilice el habla privada) que contribuye a que el niño vaya recapitulando el proceso, las estrategias, la apropiación de conceptos o acciones, y vaya tomando conciencia de su propio aprendizaje.


Lograr que el niño reconozca que sus aciertos son producto de sí mismo y no de la casualidad, que el esfuerzo que pone en cada una de las actividades contribuye en los aprendizajes, apoya al conocimiento y reconocimiento de sí mismo, al desarrollo de su autoestima, pero sobre todo a sentirse capaz de resolver cualquier dificultad que se le presente


Este análisis me ha hecho darme cuenta de mis debilidades que como educadora tengo, pero sobre todo me ha despertado el deseo de mejorar y de erradicar esas concepciones y actitudes que no me llevan a nada, en ir búsqueda de herramientas y estrategias para mejorar mi intervención, a ser generadora de aprendizajes, a que mis acciones permitan el logro de los propósitos establecidos en el nivel Preescolar y así mismo atender los principios pedagógicos.


Para culminar quiero compartir esta idea que M. LIPMAN, comparte en el libro jugar a Pensar (2008) “Los maestros y los cargos directivos, igual que las madres y los padres, son modelos, muestran con su ejemplo cómo se puede actuar y los niños con frecuencia actúan igual. Es decir que los niños interiorizan las formas de conducta de los maestros”. Pág. 53


Esta idea me invita a ser más consciente y pertinente en mi labor educativa, a ser una docente comprometida, respetuosa, con tratos y acciones positivas hacia mis alumnos, ser congruente con lo que digo y con lo que realizo, y sobre todo propiciar en el ellos el deseo y el gusto por seguir aprendiendo

viernes, 4 de diciembre de 2009

CONTEXTO TEMÁTICO

LA DUDA QUE ME LLEVARA A REESTRUCTURAR MI INTERVENCIÓN EDUCATIVA

El ser docente es una profesión que implica tener conocimiento de los contenidos a enseñar, contar con habilidades y actitudes que le permita atender a esa gran diversidad existente en las aulas, es por ello que como educadora me he preocupado y dado a la tarea de ser comprometida con mi trabajo, y con mis alumnos, he buscado la manera de que vean en mi a una persona ejemplar, siendo puntual, atenta, respetuosa, organizada, que con mis acciones y actitudes contribuya a la formación de hábitos, valores y sobre todo de aprendizajes en mis alumnos.

Las experiencias como estudiante y ahora como docente me han permitido apropiarme de modelos de enseñanza que me han sido útiles para la labor educativa, Con relación a la intervención pedagógica procuro que el trabajo sea dinámico, que los alumnos sean participes, que se expresen, propongan e interactúen entre sí, aún reconozco que muestro ciertos rasgos conductistas, como el indicarles a mis alumnos que vamos hacer y el cómo se va a realizar, reconozco que en ocasiones he sido una emisora de conceptos.

Como docente considerro que es parte fundamental que como estar en la búsqueda de la mejora continua de mi práctica educativa, preparándome y actualizándome constantemente para incrementar mis habilidades, conocimientos y estrategias que me conduzcan a una mejor intervención pedagógica.

En este momento estoy en un proceso de reconocimiento y reconstrucción de mi ser como docente, cambiando concepciones e ideologías, creo firmemente que el niño llega a la escuela con un cúmulo de conocimientos y habilidades, que es función de la escuela y en especial del docente crear un ambiente agradable y de confianza, donde a través de las diversas oportunidades esté pueda acrecentar aquellos conocimientos y habilidades, que posee en cada uno de los aspectos comunicativo, cognitivo, físicas y sociales. El trayecto de la enseñanza es un sendero que cada día trae consigo nuevos aprendizajes, es un proceso inacabado, porque cada momento que vivimos es una oportunidad para obtener más conocimientos. El niño aprende en todo momento, como menciona Emilia Ferreiro “Tienen la mala costumbre de no pedir permiso para aprender” es por eso que nuestro actuar debe de ser más consciente, basado en objetivos claros, al igual ser promotora, guía y mediadora en construcción de conocimientos.

El estar enfrentado un sinfín de situaciones con los alumnos en cuestión a las características individuales, el ser hijos únicos o los más pequeños dentro de su familia, así mismo como la reflexión y la evaluación hacia mi trabajo, me ha hecho voltear la mirada y a preguntarme ¿Cómo puedo favorecer en mis alumnos la autonomía en un grupo de segundo grado de preescolar a través de la interacción entre pares?

Pienso que es de primordial importancia ser generadora de espacios donde mis alumnos se reconozcan así mismo y a sus compañeros, permitirá que sus acciones y sus decisiones sean de manera más autónoma, que sean capaces de desenvolverse con seguridad y confianza en el aula, que sean responsables de sus pertenencias y aprendan a regular sus emociones,el conseguir propiciar en el aula un espacio en el que mis alumnos estén emocionalmente bien le permitirá apropiarse de nuevos conocimientos y desarrollar nuevas habilidades, y el proceso de enseñanza - aprendizaje será más placentero.

El Programa de educación preescolar en uno de los propósitos fundamentales menciona sobre la importancia de que el alumno debe desarrollar un concepto positivo de sí mismo, exprese sus ideas y sentimientos y para que esto le ayude a actuar con iniciativa y mayor autonomía, ¿pero cómo lograr esto?, ¿Hacia dónde donde deben ir encaminadas mis acciones?, ¿cómo yo educadora puedo ir incidiendo en este proceso?, son diversas cuestiones que me invitan a una reflexión más detallada sobre como soy y sobre todo que me permita buscar nuevas áreas de oportunidades para ir dando respuesta a esta problemática..

El analizar y reflexionar esta temática considero que es de gran importancia, en lo personal porque me permitirá desarrollar habilidades, estrategias y actitudes como docente para mejorar mi intervención, pero de igual manera será un trabajo que demostrara a las demás docentes la importancia de bridarle a los alumnos un ambiente agradable y de confianza, donde se sienta seguros para actuar de manera más autónoma, e ir construyendo nuevos aprendizajes.

La autonomía es la capacidad que tiene un individuo para actuar y desenvolverse dentro de un contexto, asi mismo para tomar decisiones al enfrentar un problema, haciendo uso de sus porpias habiliades, conocimientos y capacidades.

Muchos resultados de investigación en psicología cognitiva destaca el papel relevante de las relaciones entre iguales, en el aprendizaje de los niños, es por eso que quiero centrar mis estrategias en este aspecto, porque estoy convencida que este intercambio de experiencias y conocimientos le permitirá al niño, poner en juego diversas habilidades como el diálogo, el intercambio, el respetar roles y sobe todo contribuirá a la conformación de su propia identidad y al reconocimiento de los demás, que lo llevara a actuar de manera más autónoma.

Esta temática tiene un gran interés en mí porque será un gran desafío, recae en mi forma de intervención, en buscar las estrategias y los elementos necesarios para dar respuesta, implicará investigar, documentarme, tener un mayor conocimiento de las características de mis alumnos, y sobre todo lograr conocimientos perdurables y significativos en cada uno.

Lo que deseo tiene mucha relación con los 2 primeros propósitos fundamentales, con los principios pedagógicos y en lo que concierne al campo de Desarrollo Persona y social. “el niño desarrolla paulatinamente la capacidad emocional para funcionar de manera más independiente o autónoma en la integración de su pensamiento, sus reacciones y sus sentimientos”[1]

Esta situación se viene presentando desde años atrás, tal vez no de la misma manera, pero ha sido una preocupación que como docente he manifestado, donde me he percatado que la manera de favorecerlo no ha sido de la mejor forma, más bien ha sido de manera transversal, sin dedicarle un espacio a esta situación, creyendo en que esto se logrará en su momento, pero ahora me doy cuenta de lo importante que es lograr desarrollar esta capacidad en mis alumnos.

“Rosalba y Georgina se han mostrado algo caprichosas cuando no quieren participar o cuando quieren que se haga lo que ellas desean, he tomado una postura de no acceder a sus caprichos pero me inquieta que se comporten así”[2]

Este ejemplo hace referencia al interés de lograr atender esta situación, pero a la vez refleja la poca preparación para enfrentarla, así mismo la falta de estrategias y sustento teórico para dar una mejor atención, la cual me hace recapacitar y reflexionar sobre la importancia de investigar sobre ¿cómo debe ser la intervención del docente para el cumplimiento de la autonomía en sus alumnos?, así mismo en aquellos artículos que hablen sobre el auto concepto y la interacción entre pares.

Mi desempeño en el aula y mis alumnos, serán los principales actores que se verán involucrados en esta escenario, mi compromiso será diseñar y evaluar mi forma de intervención, e ir investigando y recolectando aquellas evidencias que den mayor sustento a los avances y a las dificultades a los que me enfrento, pero así mismo en ir en la búsqueda de áreas de oportunidades para mejorar día con día. La tarea no es fácil, y va requerir sobre todo del apoyo de los padres de familia, que de igual manera ellos les permitan las oportunidades suficientes a sus hijos para desenvolverse de manera más independiente y contribuyan a la construcción de su propia identidad personal.

Estoy convencida que el logro de los cambios en el sistema educativo tiene que empezar desde las aulas, la transformación de la prácticas docentes, el cambio de actitudes y la apertura a reconocer que nuestra labor implica estar en continua preparación. Por tanto asumo el compromiso que como maestra tengo en mis manos y procurando dar lo mejor de mi cada día, para que el tiempo que mis alumnos pasen en el Jardín sea digno de ser vivido.



[1] SEP, (2004) PEP, Programa de educación preescolar. México. p 50.

[2] .Diario de la educadora, ciclo escolar 2009 -2010 .Miércoles 23 de septiembre

martes, 1 de diciembre de 2009

CONTEXTO ESCOLAR

CONTEXTO ESCOLAR
La educación preescolar ejerce una influencia muy importante en el desarrollo personal y social de los niños y niñas, donde van construyendo su identidad personal, adquieren capacidades fundamentales, obtienen las normas básicas para integrarse a la sociedad.
Para el niño de preescolar el convivir con sus compañeros, sus maestros y sobre todo en un ambiente familiar, le permitirá adquirir confianza y seguridad en sí mismo, aprenderá a conocer el mundo, pensar y aprender permanentemente.
Para desarrollar estas habilidades en los niños se requiere conocer bien a los alumnos, cual es contexto social, político y económico que les rodea, cuál es su cultura entendida como el conjunto de conocimientos, formas de vida, símbolos y objetos que se trasmiten de generación en generación por la sociedad en la que se vive.
Pero de igual manera conocer el ambiente educativo en el cual está inmerso y a partir de éste conocimiento, generar las estrategias que contribuyan al logro de los objetivos.
Es por eso que en este escrito hablo sobre los asuntos sociales y culturales en las que mis alumnos están inmersos; y al mismo tiempo hablo sobre mi centro educativo, cuáles son nuestras formas de organización, nuestros objetivos a lograr y como se da el trabajo colaborativo en el mismo, etc.
La influencia social
El entorno familiar y social del Jardín de niños donde laboro es diverso, existen alumnos que pertenecen a una familia compuesta por madre y padre de familia e hijos, al igual existen situaciones donde los abuelos fungen la función de padres algunas otras familias están conformadas por madres solteras o padres divorciados.
Las familias son de un nivel socioeconómico medio, muchas veces mencionan que es una escuela de niños con muchos recursos pero la realidad varía mucho, porque son pocos los alumnos que viven cerca de la Institución, la gran mayoría son de diversas colonias de la ciudad, y eligen estar en esta Institución por tradición familiar, porque algunos de sus hijos ya cursaron ahí, otros por recomendación y algunos otros porque les queda cerca del lugar donde laboran.
Sus viviendas cuentan con los servicios de drenaje, agua, teléfono, luz, pavimentación, alumbrado público, etc. Por la gran diversidad cultural existente, no puedo definir un patrón claro, pero si puedo mencionar que entre las festividades que llevan a cabo son Navidad, Día de Muertos, Reyes Magos, cumpleaños. La mayoría profesan una religión católica, y unos cuantos son cristianos, pero esta situación no repercute en la Institución.
Entre sus diversiones y entretenimientos acostumbran salir a algún centro comercial, al cine o al parque tangamanga, son pocos los que asisten a eventos culturales o visitas a museos.
Los padres de familia son jóvenes, no mayores de 35 años, la gran mayoría de cuenta con escolaridad profesional o carrera técnica, una minoría sólo hasta preparatoria, es por ello que se refleja el interés, la preocupación por ofrecerles a sus hijos las oportunidades necesarias para un mejor aprovechamiento escolar.
El divorcio, las separaciones familiares y el que los padres de familia trabajen casi todo el día, son factores que influye en la escuela, porque afecta su estado emocional, se muestran con poca disposición, apatía al trabajo o en ocasiones se muestran poco tolerantes e inquietos solicitando mayor atención y poco constancia en las tareas.
El Programa de Educación Preescolar 2004 habla sobre estos cambios sociales y desafíos a los cuales nos enfrentamos y es función de nosotros responder a estos retos a través del desarrollo de las competencias intelectuales
Los padres de Familia reconocen que es de suma importancia que sus hijos cursen la educación preescolar y se ve desde la insistencia y la demanda al primer año escolar.
Poco a poco se ha manifestado el reconocimiento a la función del preescolar, comprenden que contribuye al desarrollo de habilidades, destrezas y desenvolverse de manera más segura y con independencia
¿Cómo es mi centro escolar?
El 1 de febrero del 2005 comencé a laborar en el Jardín de Niños: “La pajarita”, ubicado en la calle Julián Carrillo esq. Agustín Vera, colonia del Valle, perteneciente al Estado de San Luis Potosí. Esta Institución forma parte del Sistema Educativo Estatal Regular, pertenece a la zona 03, sector 01, turno matutino.
Fue construido el 16 de Septiembre 1969 y fundado por la Maestra Luz Ma. Wong y desde ese entonces ofrece su servicio a la niñez potosina.
El edificio tiene una infraestructura amplia, cuenta con nueve aulas, salón de música, donde se imparte la clase de Educación Física y de Educación Musical, la dirección, una cocina, bodega, baños para los alumnos y para el personal docente, la biblioteca escolar integrada en la dirección y tres patios en la cual se realiza el recreo.
El Personal Docente y de Apoyo está conformado por un Directivo, Apoyo Técnico, nueve Educadoras, Maestra de Educación Musical y Maestro de Educación Física, tres Asistentes Educativos, tres del Personal de Intendencia y una vez al mes asiste la Maestra de Teatro.
Durante este año escolar se atiende a una población de 230 alumnos, los cuales están divididos en cuatro grupos de tercer año, tres grupos de segundo y dos grupos de primer grado.
La escuela tiene como misión: ofrecer una educación de calidad a cada uno de los alumnos, desarrollando, fortaleciendo sus capacidades y habilidades cognitivas, sociales, afectivas y físicas, así mismo propiciar en ellos el gusto por el arte y el conocimiento de su entorno social al que pertenece, de igual manera fomentar hábitos y valores para su formación y la convivencia social.
Es un centro educativo con una antigüedad amplia eso ha contribuido a que las formas de organización y trabajo estén muy arraigadas, hay actividades o festejos ya establecidos como es el día de los abuelos en el mes de marzo, semana de festejo por el día del niño, día del padre, día de la madre, etc.
Al concluir el ciclo escolar se lleva a cabo una reunión, donde además de asignarnos el grupo al que atenderemos, se establece el color con el cual el grupo se identificará, se establecen comisiones como: la organización de eventos, periódico mural, la vialidad, acuerdos para la primera reunión con padres de familia.
La persona encargada del evento propone la forma que se va llevar a cabo la actividad, estableciendo comisiones a las demás integrantes del plantel, así mismo establece el lugar, la hora, el uniforme, etc. Esto se comunica en las juntas de organización establecidas el primer jueves de cada mes, tomando en cuenta que el evento sea un mes antes, para poder prever lo que se requiera. Por lo general los eventos se llevan a cabo en el albergue Rafael Nieto ubicado a un lado del Jardín, porque dentro de la Institución no existe un espacio suficientemente grande para todos.
Las reuniones de Consejo Técnico Pedagógico (COTEPE) son llevadas a cabo el último jueves del mes, en las que el apoyo técnico es la que dirige y organiza, impartiendo temas de interés para el personal docente, algunas veces participamos las educadoras como expositoras o se invita un especialista, lamentablemente el tiempo destinado no es suficiente porque la llevamos a cabo al término de la jornada con los niños de 12: 45 a 1: 30.
Estamos conscientes que los papas y algunas mamás trabajan por la mañana y no pueden asistir con mucha frecuencia al plantel, es por eso que la organización de las reuniones y eventos no son tan frecuentes, así mismo se trata de abordar temas como el desarrollo de los alumnos, aspectos a organizar e invitarlos a colaborar, a involucrarse en las actividades del aula y en la institución.
De acuerdo con Mónica Gather (2004) “La participación y colaboración de los diversos actores (padres de fam., docente y autoridades), contribuyen al logro de los propósitos porque todos ayudan a lograr mejores resultados de manera conjunta.”
Aún dentro la Institución existen algunos ritos y mitos de la educación preescolar, como son el decorado de las aulas, el creer que una buena educadora es aquella que tiene al grupo en orden y en silencio, se generaliza el trabajo por grados, es decir las de tercero llevaran libro o libretas aunque tú como educadora no quieras, y en esta situación influye mucho el qué dirán los padres de familia, su argumento es para evitar problemas.
Aún prevalece mucho el trabajo motriz o más bien la preparación para la primaria, dejando de lado las habilidades y capacidades del niño, poco a poco se está tratando de erradicar estas creencias y prácticas, de cierta manera la supervisora ha contribuido a esto, al invitarnos y apoyarnos en este cambio.
Yo decido la forma y la manera de organizar el trabajo, se me da la libertad de diseñar las situaciones didácticas, tomando en cuenta los lineamientos del PEP 2004 y los acuerdos preestablecidos con las demás educadoras del grado.
Son pocas las veces que tenemos oportunidad de compartir experiencias, en lo personal yo he sentido la necesidad de recurrir a una compañera que tiene mayor antigüedad, así mismo con la maestra de música, compartimos ideas, experiencias, dudas o cuando se presenta alguna dificultad con algún alumno.
De igual manera con el Apoyo técnico, tengo la oportunidad de compartirle lo que me sucede en el aula, si se presenta algún inconveniente con un padre de familia o sobre alguno de los alumnos, ella busca información o me orienta basándose en sus experiencias.
El que sea un gran número de personal contribuye a que exista cierta fragmentación entre los integrantes, a lo que Mónica Gather (2004) describe como una escuela de estructura fragmentada, constituida en grupos separados que a veces tienen problemas de competición o conflicto, tratan de defender constantemente su autonomía y de hacer prevalecer su punto de vista” (pág. 67).
Los grupos están muy marcados por la antigüedad, por el cargo que desempeñan o por afinidad. Existe mucho la distorsión de información y eso ha contribuido a que existan enfrentamientos o mal entendidos, esto ha ocasionado el trabajar de forma aislada, a realizar solo lo que le compete.
Creo que si en la misión se busca ofrecer una educación de calidad es importante que todos los miembros del plantel nos involucremos y demos lo mejor de cada uno para el logro de la misión, para que ese reconocimiento del qué tanto se habla sea algo vivencial.
Mi grupo
Actualmente atiendo al grupo de 2° C, integrado por 26 alumnos, de una edad promedio de 4 a 5 años, son 9 niños y 17 niñas, es un grupo dinámico, con disposición al trabajo, constantemente me cuestionan sobre aquello que les causa interés, son amigables., juguetones Es un grupo de nuevo ingreso, algunos alumnos provienen de una guardería o de otra Institución, aunque también hay niños que es su primera experiencia escolar.
Muestra gusto e interés por la lectura de cuentos, así mismo me cuestionan sobre: ¿Qué dice aquí?, ¿cómo se llama este libro?, hay alumnos que comienzan a interpretar el contenido del texto, guiándose por las imágenes, muestran agrado por las actividades que implica poner en juego el control de su cuerpo, como correr, trepar, saltar, al igual en participar en rondas o juegos organizados.
La gran mayoría utiliza un vocabulario amplio para comunicarse y expresarse, me platican sobre lo que hacen en casa, lo que les gusta hacer o ver, así mismo expresan sus ideas, sentimientos o estados de ánimo.
Durante este ciclo escolar me estoy enfrentando a un desafío dentro del grupo, en dar atención y establecer una comunicación con dos alumnos que presentan dificultad para comunicarse oralmente, se comunican a señas o sólo pronuncian algunas palabras, esta situación me inquieta porque no quiero caer en el adivinarles o generar que mis alumnos no sientan la necesidad de hablar.
Están en proceso de participar al frente o realizar actividades de manera independiente, de la misma manera el regular sus emociones es un aspecto que está en proceso, en ocasiones se pelean entre sí, lloran o hacen berrinche, tal vez estas conductas son formas de resolver sus problemas.
Esta situación ha generado en mi el deseo de propiciarle a mis alumnos un ambiente agradable, de seguridad, que ellos se sientan en confianza para desenvolverse de manera independiente, que sean más consientes de sus acciones y decisiones, que se reconozcan como un ser único con sus cualidades y habilidades, contribuir al fortalecimiento de su autonomía.
Así mismo generar aprendizajes significativos, que le sean útiles para toda su vida, que las actividades que diseñe lleven al niño a la reflexión, al análisis, a formular a comprobar sus ideas, así mismo en brindarles oportunidades para que se expresen, intercambien ideas, conocimientos.
Quiero lograr establecer una buena comunicación con los padres de familia, para lograr un trabajo conjunto entre la escuela y ellos, para un mejor aprovechamiento escolar a través de diversas actividades como tareas compartidas, lectura o exposición de algún tema en el aula, mañanas de trabajo, reuniones, etc.

sábado, 21 de noviembre de 2009

HISTORIA DE VIDA

Las huellas de mi vida

Hacer una mirada retrospectiva en esta etapa de mi vida me ha permitido analizar más detenidamente algunos momentos significativos que han dejado una huella imborrable para la construcción de lo que soy como persona y como profesional. Mi nombre es Martha Sarai Franco Gaitán, nací el 2 de febrero de 1983, en la ciudad de San Luis Potosí, siendo la quinta hija de Manuel Franco y Laura Gaitán.

Mi familia se caracteriza por ser alegre, unida, con buena comunicación, desde muy chicos se nos han inculcado valores y principios, como el respeto, el compromiso, la ayuda mutua, residimos en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez del cual mi madre es originaria y donde casi vive la mayor parte de mi familia

Soy la más pequeña de todos mi hermanos, me describo como una persona alegre, amigable, compartida, dispuesta ayudar a los demás, procuro tener buena relación con todos, soy el mediador cuando hay enfrentamiento o disgustos entre mis hermanos, me dicen que asumo el papel de mamá cuando ella no está en casa.

Dentro de la familia, cada uno asumimos un rol, una responsabilidad para ayudar en las tareas de la casa, se nos ha inculcado la importancia de estar preparados para la vida, el ser congruente con lo que decimos y hacemos, sobre todo el ser responsables y comprometidos con nuestro trabajo.

Mis padres han sido una pieza fundamental, el mayor motivo de orgullo y admiración porque ellos han luchado desde su infancia por ser alguien en la vida, porque a pesar de las adversidades no han dejado de perseguir sus sueños.

El ser hermana gemela, siempre ha sido una experiencia buena, porque los juegos, y las travesuras en la infancia fueron compartidas, de igual manera es un conjunto de sentimientos que solo él y yo podemos entender, esta situación durante un tiempo ocasiono que mostráramos una actitud de dependencia entre ambos, no podíamos actuar de manera independiente, a donde iba uno iba el otro, compartimos juntos los primeros años de escuela.

Comenzamos un breve tiempo en el nivel preescolar, posteriormente ingresamos en la Escuela Primaria Luis G Medellín Niño, donde mi madre trabajaba como maestra y en la cual mis hermanos cursaban la primaria, mi aprovechamiento escolar en esta etapa fue buena, por lo general siempre estaba en el cuadro de honor, me agradaba participar en las diversas actividades deportivas y culturales. La experiencia con mis maestros fue diversa desde aquellos que me trasmitieron el amor a esta profesión, como aquellos que su apatía y en ocasiones sus malos tratos hicieron algo difícil el transito.

Recuerdo que el maestro de quinto grado me llamo la atención por no haber elaborado bien unas figuras geométricas e inclusive me ridiculizó en frente del grupo, y eso sus palabras me han quedado grabadas, porque a partir de ese suceso me causa cierto temor que alguien me comente algo negativo cuando realizo un trabajo, así mismo al exponer mis ideas o exponer frente al grupo.

Mi adolescencia fue una etapa que me ha dejado recuerdos perdurables y sobre todo muy significativos, en ese periodo tuve la oportunidad de participar en un grupo de adolescentes donde la convivencia y las relaciones afectivas contribuyeron a la formación de ideas y concepciones, como la importancia de trabajar en equipo apoyado en la comunicación y el establecimiento de acuerdo, el respeto, así mismo me permitió asumir responsabilidades en la organización de encuentros, y sobre todo porque fundé amistades sólidas.

Fue en esta época de la secundaria donde mi hermano y yo tuvimos que separamos, donde cada uno asumimos nuestras propias responsabilidades y decisiones, en búsqueda de nuestro espacio, preferencias y sobre todo de nuestra individualidad.

El transcurso en la preparatoria fue un momento difícil porque ya no me encontraba con amigos de la secundaria, el ambiente era muy diferente al que estaba acostumbrada, mi desempeño fue bueno, ahora las exigencias eran mayores, fue en este momento donde comencé a preguntarme ¿Qué quería ser?, ¿ qué carrera estudiar?, ¿ qué futuro me esperaría?.
El momento de decidir

La decisión de ser maestra la tomé al cursar el tercer semestre de preparatoria, aún existía la inquietud de ser psicóloga, pero puedo decir el que mis padres, tíos y mi hermana ejercieran esta profesión, fueron factores que influyeron para tomar la decisión de ser maestra, porque a través de su gusto por la docencia, trasmitieron el deseo de ejercer esta profesión, me decía a mí misma, que quería ser maestra de preescolar, porque los niños de primaria son más difíciles por la edad, no son tan sinceros, además que consideraba que podría tener mejor control con los pequeños, que con los grandes.

Cuando decidí estudiar esta profesión fue un momento importante y central en mi vida, dónde surgieron muchas interrogantes ¿si en verdad seria esto a lo que me dedicaría toda mi la vida?, ¿Qué haría con esos niños?, ¿Cómo le haría?, ¿Qué necesitaría hacer para generar aprendizajes en ellos? Poco a poco como fue marchando el tiempo y los semestres en la escuela Normal, me fui dando cuenta, que en verdad era lo que me satisfacía, fue naciendo en mi el amor y el gusto por esta profesión.

Las prácticas educativas me permitieron conocer el trabajo y las formas de organización en el Jardín de niños, la planeación de estrategias didácticas, organización de tiempos y recursos, me hicieron darme cuenta de la responsabilidad que implica el estar frente a grupo, algo que siempre me inquieto en los jardines de niños en los cuales practicaba fueron las rivalidades, la apatía y el poco compañerismo existente en los miembros del plantel.

Como menciona Stella M. Pasquariello “El contacto con las instituciones educativas y sus configuraciones particulares y el reconocimiento de la complejidad de la tarea docente, va a permitir a los estudiantes desarrollar en la acción el doble procesos de enseñar y aprender a ser docente y a construir diferentes estrategias que moldean su trayectoria posterior” pp. 33

Durante el 7º y el 8º semestre de mi formación tuve la oportunidad de tener un acercamiento más real y continuo del trabajo en el Jardín de Niños, porque durante este lapso estuve como practicante, en este tiempo adopte ciertas concepciones sobre el trabajo, como por ejemplo: la importancia de la socialización y un buen ambiente de trabajo para los alumnos , la comunicación que exista con los padres de familia debe ser abierta, así mismo que la organización de las actividades es importante para el éxito de estas.

Los inicios de mi profesión

Cuando egresé de la Normal del Estado tenía muchas ilusiones y expectativas de lo que iba a llevar a cabo cuando comenzara a trabajar, pero cuál fue mi sorpresa que cuando fui al sindicato, me regresaron diciendo “ahorita no hay nada, date tus vueltas haber que pasa” Eso me hizo sentir decepcionada, sin ilusiones y abatida.

Después de 6 meses cubrí un interinato de gravidez en la comunidad llamada Agua Prieta, perteneciente al municipio de Mezquitic de Carmona, aunque no sabía dónde era exactamente, ya era una ilusión el comenzar a trabajar, era un Jardín de Niños unitario. Fue en este lugar donde afiance el amor y el compromiso a mi trabajo, que la escuela puede ser una oportunidad de vida para los alumnos, que con una buena intervención docente puedo generar el deseo de seguir avanzando en búsqueda de nuevas expectativas de vida, aprendí la importancia del compañerismo y el intercambio de experiencias entre los docentes para una mejora.

En febrero del 2005 me otorgan mi plaza base en el Jardín de Niños: “La Pajarita”, después de conocer al grupo de 2° grado, surgen en mi tantas interrogantes, porque era otro contexto totalmente diferente a donde había estado, este momento fue de gran impacto en mi vida, creo que nunca había experimentado un sentimiento de indecisión y de conflicto como en esos tiempo, eran tantas cuestiones que no recuerdo muy bien como se fueron dando respuesta, pero estoy convencida que la práctica docente te brinda herramientas y habilidades, que te va ayudando a conformar tu ser como docente.

Como menciona Gabriela Gamberini “La llegada a la escuela y específicamente al aula, las relaciones que se establecen con los “otros” profesores, alumnos, directivos la dinámica institucional, el desarrollo de una propuesta didáctica, la puesta en acto de estrategia de enseñanza, las particularidades de los grupos de estudiantes, la toma de decisiones en contexto áulico signados por la complejidad y la pluralidad, van delineando el entramado donde el trabajo docente asume características peculiares” Pág. 59

El ingreso a este nuevo ámbito fue algo complicado porque no conocía a nadie, ya tenían su organización bien establecida, sus propias amistades, fue difícil, tanto en el grupo con los niños, como con las compañeras docentes, poco a poco me fui ganando el aprecio de mis alumnos, de los padres de familia y mis compañeras.

Fue en este lugar donde tuve la oportunidad de conocer a una compañera de trabajo, que con su dedicación, su forma de ser ante sus alumnos, siempre buscando estrategias para generar aprendizajes, ha influido a seguir sus pasos.

En los años 2006 y 2007 me dan la oportunidad de estar a cargo del grupo de 1° de preescolar, al principio hubo ciertos titubeos por la edad, pero conforme los iba conociendo me sentía más segura y en confianza, mis decisiones y mis objetivos eran más claros, ahora me enfrentaba a otro desafío: la atención a alumnos con necesidades educativas especiales, en la que me di a la tarea de buscar orientación, investigar sobre la problemática, guiarme por mi intuición, no puedo decir que fue suficiente, pero si trate de dar una mayor atención.

El vivir tantas anécdotas y experiencias me han ayudado a conformar creencias, concepciones, formas de actuar, recordando cómo era al inicio y de quien soy ahora, han habido muchos cambios, mis perspectivas y formas de ser se han modificado, ahora estoy convencida de que mis acciones y actitudes deben estar centradas al logro de aprendizajes y capacidades en mis alumnos.

Retomando lo que menciona Huberman sobre su modelo de Fases en la Carrera de los enseñantes puedo ubicarme en la fase II La ESTABILIZACIÓN, entre sus características habla sobre la consolidación de ciertas habilidades prácticas que contribuye a la seguridad en nuestro trabajo e identidad profesional, me siento segura de lo que llevo a cabo en el aula, de las decisiones que tomo y de cierta manera a reconocerme como docente.

Ahora estoy consciente y asumo el gran compromiso que tengo en mis manos, la responsabilidad de dar lo mejor de mí, el buscar las estrategias y situaciones didácticas que me permitan el logro de los objetivos planeados, el lograr desarrollar y potenciar aquellas capacidades, habilidades de mis alumnos.

Me siento satisfecha con mi trabajo, reconozco que me falta mucho camino por recorrer y por aprender, el estar estudiando la maestría me ha ayudado a conocerme como persona y docente, a reconocer mis errores y debilidades, pero sobre todo me ha ayudado a reflexionar y a preguntarme cada día del trabajo que estoy llevando a cabo, e ir en búsqueda de mi profesionalización.

Puedo decir que en este momento de mi vida soy una mujer tratando de construir mi futuro, con sueños e ilusiones, forjando un camino firme y seguro, en búsqueda de mi realización personal y profesional, asumiendo algunos roles: mujer, hija, tía profesionista, amiga, compañera, etc.

El camino que he recorrido no ha sido fácil pero cada una de esas piedras y obstáculos a los que me he enfrentado han contribuido a lo que soy y sobre todo han generado el deseo de seguir adelante y aprender cada día más.


VIVE CADA MOMENTO DE TU VIDA COMO SI FUERA EL ULTIMO. !DISFRUTALA¡